El Consello Galego de Colexios Médicos considera inaceptables e injustas las manifestaciones que, desde diferentes vías, están achacando a la Atención Primaria de Galicia, dejación en la asistencia a los pacientes. Y, de algún modo, creando una corriente de opinión, minoritaria, pero peligrosa. Lamentablemente, además, algunas de dichas manifestaciones han sido vertidas por compañeros de profesión.
Todas ellas denotan un desconocimiento absoluto de la realidad en los Centros de Salud y consultas de Atención Primaria donde sus profesionales además de dar respuesta a la atención sanitaria habitual deben hacer el seguimiento a los pacientes con COVID19 que se mantienen en sus domicilios y, con frecuencia también, a los contactos estrechos de los mismos. Esto es así desde el comienzo de la pandemia, que obligó a reorganizar el modelo de atención para, entre otras cosas, garantizar la máxima seguridad posible a los usuarios, primando la consulta telefónica sobre todo para trámites administrativos, renovación de recetas ... Pero manteniendo siempre la consulta presencial y la visita a domicilio, cuando se considera necesario en la imprescindible gestión de la demanda por los médicos de familia y pediatras de A.P.
Confundir la consulta no presencial con la falta de asistencia es un grave error. Lo importante es que ésta sea de calidad, se utilice la fórmula que se utilice para dar respuesta a las variables necesidades asistenciales que se les plantean en el día a día a los médicos de A.P.
Para ello vuelve a ser necesario insistir en la gran dificultad de mantener esa calidad en un contexto de sobrecarga crónica que ya sufría la Atención Primaria antes de la pandemia -que ha sido y es todavía mayor en su transcurso- y para la que no se han aplicado aún ninguno de los múltiples planes de reforma y mejora redactados por grupos de expertos, grupos de trabajo ... en los últimos años. En todos ellos se destacaba la necesidad de reforzar este nivel asistencial, incrementando plantillas, reorganizando las jornadas de trabajo y modificando los roles de las distintas profesiones que forman los equipos de Atención Primaria para descargar a médicos de familia y pediatras de cuestiones administrativas, etc ... que pueden ser resueltas sin su concurrencia. No es posible mantener agendas diarias con 40-50 consultas que no permiten disponer del tiempo suficiente para una atención personalizada y resolutiva.
En los informes de los expertos se enfatizaba sobre la urgente corrección de la sobredemanda (la denominan demanda "bloqueante") con medidas concretas para limitar a un máximo las consultas programadas diarias, estableciendo procedimientos alternativos de resolución de los problemas con triajes previos en base al motivo de consulta, con mejoras en las herramientas de solicitud de cita (telemáticas para los más jóvenes y telefónicas para los mayores ... )
Asimismo es importante volver a resaltar que no es posible una solución de los problemas del sistema sanitario público sin una buena integración entre la atención primaria y hospitalaria, no meramente administrativa sino sobre todo asistencial a través de la cooperación y la coordinación entre ambos niveles. Los déficits en la A. P. llegan al hospital y los déficit (listas de espera ... ) en el hospital afectan también a la A.P.
Por todo ello, exigimos de nuevo a la Administración Sanitaria en Galicia que afronte sin demora los cambios necesarios y, como le hemos pedido en varias ocasiones, informe a la ciudadanía del enorme trabajo y dedicación de los médicos de A.P. y evite con ello la generación de injustas y desinformadas corrientes de opinión que cuestionen el generalizado buen hacer del primer y esencial nivel de nuestro sistema sanitario público. Para ello puede contar, como siempre, con los Colegios Médicos de Galicia.
Consello de Colegios Médicos de Galicia